Dialogamos con Claudia Sar, integrante de la institución rotaria quien señaló “Hablamos con la gente de Desarrollo Social en mayo del año pasado, para ver cómo podemos empezar con esta donación, como encarar el proyecto” agregó que “son sillas especiales y a medida, adquiridas en los Estados Unidos, la fabrican en la cárcel de Montana, luego fueron derivadas a la localidad previo trámites aduaneros, son cien aproximadamente que llegaron al país y algunas de ellas, las solicitadas desde nuestro proyecto, son las que entregamos en el Puerto y aquí en San Antonio, todo esto se dio por un seguimiento especial, para cada uno de los casos” significó.
“Hemos iniciado los trabajos con profesionales que se dedican a seguir los casos puntuales y la idea principal es cambiar la calidad de vida para los chicos especiales, entonces viendo la felicidad de las familias, nos emociona y nos llena el corazón por la tarea cumplida” sostuvo Sar.
Según explicaron los rotarios, cada silla tiene un costo de 4 mil dólares y fueron hecha a medida para cada uno de los chicos y jóvenes que la recibieron.