El bloque que preside Martini presentó esta semana un pedido de informes sobre el plan para la apertura de la temporada invernal en la provincia y particularmente en Bariloche. El FdT quiere saber cuáles son los protocolos sanitarios previstos para contener la afluencia de visitantes y si se priorizará la vacunación del sector que tiene contacto con los turistas.
“Recuperar la actividad turística para Bariloche es urgente. Los 14 meses de cierre obligado por la pandemia tuvieron consecuencias gravísimas para la economía de la ciudad, pero a la vez tenemos que tener como premisa que debe ser ante todo un destino seguro, para los turistas que llegan, y también para los barilochenses, y eso es lo que le estamos preguntando al Ejecutivo provincial: cuál es el plan y qué precisiones están tomando”, señaló la presidenta del bloque del Frente de Todos, María Eugenia Martini.
Por su parte, el legislador de esa bancada, Ramón Chiocconi dijo que “es necesario generar confianza y seguridad para tener temporada de invierno porque el sistema de salud de Bariloche está colapsado”.
Coincidieron además en que sería importante avanzar con la vacunación para el personal del sector, que tendrá directo contacto con quienes elijan la provincia para pasar sus vacaciones. “Quienes se desempeñan en hoteles, conducen remises y taxis, en los restaurantes, en los comercios de alquiler de equipos, fotógrafos, guías y demás trabajadores y trabajadoras de diferentes rubros estarán muy expuestos y deberían ser prioridad ante la llegada masiva de personas a la zona”, enfatizó Martini.
De esta manera, explicaron el fundamento del pedido de informes presentado este viernes en la Legislatura en el que bloque del Frente de Todos solicitó al Poder Ejecutivo detalles sobre el plan de apertura al turismo durante la temporada invernal.
La preocupación esta puesta particularmente en San Carlos de Bariloche, que centra sus expectativas de reactivación económica como destino de alta demanda durante el invierno.
La ciudad aplicó el último mes medidas restrictivas de distinta intensidad a la circulación y el comercio con las que consiguió morigerar la curva de casos positivos por Covid-19, aunque el sistema sanitario -con una ocupación casi total de camas en terapia intensiva– continúa funcionando al límite.
En ese contexto, los legisladores apuntaron a que se den precisiones sobre la modalidad que tendrá la apertura al turismo, esto es, si será general o gradual, procurando controlar el ingreso de visitantes a la ciudad.
En otro de los puntos pidieron al Ministerio de Turismo que “indique y describa en qué consisten los protocolos sanitarios específicos para los distintos rubros comerciales y prestadores de servicios a aplicarse durante la temporada turística en la ciudad”, y que informe además “si está previsto cómo se realizará la fiscalización y el control del cumplimiento de los protocolos sanitarios establecidos”.
En el mismo sentido, otro de los aspectos que preocupa refiere a los recursos – espacio físico, trabajadores, insumos, camas UTI, transporte sanitario de emergencia- que tiene previstos el gobierno para el refuerzo y ampliación de la atención de pacientes Covid-19.
En tiempos de normalidad Bariloche supera los 300 mil turistas durante la temporada de invierno, una cifra que duplica al número de habitantes de la ciudad. Este año, la situación sanitaria dificulta hacer proyecciones, en especial porque la Argentina mantiene sus fronteras cerradas, algo que impide el arribo de extranjeros pero que a la vez intensifica el turismo nacional.
Que “indique qué requerimiento o constancia sanitaria se exigirá a las personas que arriben a la ciudad por motivos turísticos, y por cuenta de quién correrán los gastos devenidos de la realización de las pruebas clínicas requeridas”, preguntaron los legisladores.
Los pedidos fueron dirigidos a la ministra de Turismo de Río Negro, Martha Vélez, y apuntaron a la necesidad de contar con información oficial para anticipar un análisis de las consecuencias sanitarias que pudiera tener la apertura de la ciudad sin un plan consensuado con los sectores vinculados al Turismo, que incluya controles taxativos a la circulación y la estricta aplicación de protocolos.
“El gobierno provincial debe asumir su responsabilidad y dejar de depender de la Nación, proponiendo su propio plan provincial, que además serviría para promocionar el destino como sitio turístico seguro, con controles, con cuidados y con sus trabajadores vacunados, garantizando a los potenciales visitantes, que en nuestra región serán tratados con los recaudos sanitarios que corresponden y que se merecen”, concluyeron Martini y Chiocconi.
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