Impactará a los usuarios de los segmentos más bajo (N2) e intermedio (N3). Es por la puesta en marcha del Período de Transición de los subsidios, que en principio se extenderá hasta noviembre.
Sin demasiadas precisiones, el gobierno nacional confirmó que el mes llegará con un aumento en el precio de la energía que pagan parte de los usuarios residenciales del país. Se trata del primer paso del denominado Período de Transición hacia Subsidios Energéticos Focalizados que impactará en los segmentos que hoy tienen más subsidios.
De acuerdo a lo informado desde la Secretaría de Energía de la Nación a este medio, la suba se dará en junio para los usuarios de los segmentos N2, el de menores recursos, y N3, el grupo intermedio que hoy tiene un tope de consumo en el caso de la energía eléctrica de 450 kWh por mes, a partir del cual abona el mismo precio que los usuarios del segmento N1, el de mayor poder adquisitivo.
Este cambio se detalló que no se trata de la actualización mensual por el impacto de la inflación que desde el mes pasado esperan que se aplique tanto las distribuidoras como las transportistas de gas y energía eléctrica del país.
Esa suba, que afectaría a la totalidad de los usuarios, incluyendo a los comercios e industrias, se volvería a postergar un mes más hasta julio, en un intento por evitar que empuje la inflación a valores más altos que los esperados por el gobierno.
El aumento que se aplicaría a partir del sábado consistiría en un corrimiento en el techo o recorte de los subsidios que hoy tienen los segmentos N2 y N3, que en conjunto representan cerca del 70% del total de los usuarios residenciales del país.
Este aumento es el único que queda claramente planteado en el reciente Decreto 465/2024 que se publicó el martes con la firma de Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo. Ya que mientras la mayoría de los 13 artículos del texto son orientativos de políticas que podrían tomarse, el artículo 3 plantea concisamente que se elimina el tope en las facturas que se rige hasta hoy por el Coeficiente de Variación Salarial (CVS).
Hasta el momento rige un tope para los aumentos en las tarifas que anualmente podían tener los usuarios de los segmentos bajo y medio, del 40% del CVS en el primer caso y del 80% en el segundo. Al eliminar este techo, algo que se hizo el martes con el decreto, lo que se habilitó en la práctica es que los aumentos en las tarifas de energía eléctrica y gas puedan ser mucho más altos.
La razón detrás de esta modificación está en lo que publicó Energía On el sábado, que es la disparada en los subsidios a la energía que por ejemplo en el caso del servicio eléctrico llegaron a superarse a valores mucho más altos que los que regían en el anterior gobierno, precisamente ante la imposibilidad de subas más altas a los usuarios N2 y N3 que hoy cubren en la tarifa eléctrica solo el 4 y 5% del costo real, respectivamente.
A pesar de que junio está a horas de comenzar, desde el gobierno no se brindaron mayores precisiones sobre cómo será este aumento ni en términos porcentuales, ni tampoco si abarcará a los dos servicios de energía eléctrica y gas o solo a uno.
El Período de Transición creado por Nación contempla inicialmente un plazo de seis meses, que puede extenderse como máximo por otros seis meses, para poner en funcionamiento el nuevo sistema de subsidios basados en una Canasta Básica Energética (CBE) que a diferencia del actual sistema que contempla subsidios sin tope para los usuarios N2 y con un tope relativamente alto para los N3, en el nuevo diseño solo se brindará una ayuda económica a partir de los ingresos de cada familia y sobre un consumo modelo, no sobre el total de la factura.