El ministro de Economía de la provincia Luis Vaisberg analizó el impacto de la crisis en Río Negro: reservas, deudas tomadas y reclamos salariales, brindó un panorama del presente en materia económica.
Las medidas económicas lanzadas a nivel nacional luego de los que fueron las PASO, generó que las provincias sintieran el cimbronazo. En el caso de Río Negro, por ejemplo, en los próximos días vence una deuda en dólares (10.5 millones de la moneda estadounidense) correspondiente a una cuota del Plan Castello, y que se deberá afrontar con todo lo que significa en este momento, con un dólar oficial a 365,50 pesos y una devaluación del 22 por ciento que también impacta en la diaria.
Por este motivo, el ministro de Economía de Río Negro, Luis Vaisberg, viajó a Buenos Aires para desarrollar distintas reuniones vinculas a la macroeconomía. Pero, además, para tener un panorama algo más claro, para saber cómo seguir, ya que todo lo que ocurre en Casa Rosada golpea de lleno en todas las latitudes del país. Ya de regreso, dio un pantallazo del presente económico a Radio Noticias de Viedma.
Consultado por el impacto que tuvo lo que ya es de público conocimiento, indicó: “Cuando uno analiza cómo les toca a las provincias, lógicamente que hay que estar muy alerta, muy preparado para esta noticia. Creo que el primer cimbronazo que se vivió a nivel general fue lo del domingo, lo de las elecciones. Luego el lunes, con la devaluación, entonces hay una combinación de política y economía que realmente impacta muchísimo”.
Consultado sobre las prioridades ante una crisis de estas características, remarcó: “Nosotros, desde la provincia, venimos desde…porque realmente no nos ha tocada vivir ninguna linda, desde que arrancamos fueron todas crisis, y este impacto del dólar tiene una consecuencia directa que es en las deudas tomadas en dólares. Puntualmente, ahora tenemos que cancelar un servicio de intereses del Plan Castello para lo cual ya veníamos preparados, y esta devaluación, lógicamente que nos va a costar algo más, mucho esfuerzo, pero tenemos las cuentas fiscales ordenadas como para poder afrontarlo”.
“Indirectamente lo que estamos viviendo a nivel país lo estamos viviendo en la provincia. Hay un aumento que se está dando en los precios de los bienes, de los servicios, que realmente no sabemos a ciencia cierta cuál va a ser el impacto directo, pero el estado, nosotros, como grandes consumidores de bienes y servicios lo estamos sufriendo. Primero, porque hay veces que esto crea restricciones en la cotización o la entrega de esos bienes y servicios hasta que se vislumbre un precio cierto de los productos. En segundo lugar, porque los ingresos, hasta que esto…porque no es que atrás de la devaluación viene el aumento de ingresos. Es escalonado, no sabemos si va a pasar a ciencia cierta, entonces estamos en situaciones complejas y difíciles”, remarcó.
Consultado por las reuniones en Buenos Aires, sobre lo que lo motivó a esto, explicó: “Una conducta que hemos tenido siempre fue tener todas las herramientas disponibles en estos escenarios complejos. Y una de las herramientas disponibles, la cual disponemos por la ley de Presupuesto es el tema de salir al mercado a colocar bonos o letras. Lógicamente, con carácter restrictivo, pero teniendo la herramienta disponible”.
“Entonces, una de las reuniones claves fue con el ministerio del Interior, entregando toda la documentación, donde inicia el trámite de tener esa herramienta vigente en caso de que haya que salir al mercado, en caso de que esto empeore, tenemos que tener ese escenario previsto. Después una reunión en el Banco Nación, con empresarios…un congreso de la Cámara de Empresarios, donde percibimos ese ambiente de cómo están viviendo esta situación”, recalcó.
Sobre lo que genera una devaluación como la que se dio, y cómo hacerle frente, dijo: “Empiezan los reclamos salariales, pero no sé da…Es imposible que se pueda dar devaluación, aumento de precios, aumento de ingresos para hacer frente en un periodo muy corto a todo este cambio que inicia una devaluación. Lógicamente que con el correr del tiempo, en horizonte de planeamiento más altos, es más factible tratar de acomodarse…horizonte de tres meses, de largo plazo son difíciles”.
“Luego de una devaluación hay un periodo de reacomodamiento de todas las áreas, de todos los sectores, y tiene que haber un periodo de reacomodamiento de los ingresos en la provincia para poder tratar de acompañar esta devaluación”, enfatizó sobre lo que se viene, con gremios pidiendo reapertura de paritarias.
En otro pasaje de la entrevista, sobre la economía de la provincia, Vaisberg subrayó: “Tenemos la principal deuda en dólares que ya me tocó vivirlo al principio de esta gestión, donde tuvimos que renegociarla. y acá expectantes, como el horizonte se hace cada vez más corto, hoy la provincia, el próximo evento que tiene, es pagar los servicios de la deuda en septiembre, en dólares. Esta devaluación implicó unos 800 mil millones de pesos adicionales”.
“Hoy nos encuentra en esta situación con las reservas para poder afrontar este gasto. El año que viene, donde vence capital, si está atado a proyectos energéticos, creo que la provincia no va a tener ningún tipo de inconveniente en repensar esa deuda, en ver cómo gestionar ese pasivo grande que tantos beneficios provocó a la provincia en materia de obras. Hablar del año que viene es muy difícil de planificar”, remarcó.
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