Con el título «San Antonio Oeste: la interna del municipio complica al PJ» el diario digital político LETRA P señala lo soguiente en un artículo referido a la situación del partido gobernante.
El intendente y el titular del Concejo Deliberante están enfrentados. El diputado Javier Iud, un fiel seguidor de Miguel Ángel Pichetto, en medio de la pelea. El rol de Soria.
La interna del peronismo rionegrino tiene uno de sus más complejos escenarios en el municipio de San Antonio Oeste (SAO). La constante competencia entre el intendente, Luis Ojeda, y el presidente del Concejo Deliberante, Luis “Pucho” Esquivel, erosiona el armado que logró consolidar el ahora diputado provincial Javier Iud y debilita la estructura que busca recuperar la provincia en 2019.
Una vieja interna entre dos compañeros manifiesta la segmentación en el Partido Justicialista (PJ) de Río Negro que, de a poco, comienza a encolumnarse detrás del jefe comunal de General Roca, Martín Soria, para las elecciones de 2017 y 2019. Esquivel, en el cuerpo legislativo local, hace tiempo se acercó a la estructura orgánica del Valle a diferencia del pichettismo: el sector que Ojeda pertenece.
Iud, que siempre se definió como un “ferviente” seguidor de Miguel Ángel Pichetto, quedó en problemas por las rencillas del oficialismo que supo manejar a gusto. Cada obra y gestión para SAO, el puerto del Este y Las Grutas se logró gracias a la intermediación del Senador nacional pero el desequilibrio entre el Ejecutivo sanantoniense y el Concejo, más la estrepitosa caída en 2015 de Pichetto, resintió los cimientos del espacio local.
RENCOR. El enfrentamiento entre Ojeda y Esquivel surgió en 2011. Cuando se cerraron las nóminas para la Legislatura provincial, lugar que Esquivel supo transitar hasta diciembre del 2015, a Iud no le quedó otra –por la presión– que poner a Pucho en la lista. Cuando tenía que buscar sucesor, Ojeda logró imponerse pero el ex diputado no soportó el «destrato» e inició, tras recalar en el Concejo, una incesante carrera para atacar a destajo la nueva gestión.
Según pudo recopilar Letra P a través de fuentes del justicialismo de SAO, Esquivel no abandona la intención de jugar por la intendencia. «Es muy terco y se le puso en la cabeza que quiere ganar el Municipio», explicaron desde la ciudad atlántica. El problema, como remarcan, es que la oposición la hace desde la estructura del Frente para la Victoria (FpV) y muy cerca de un concejal opositor alineado al gobernador Alberto Weretilneck.
José María Clemant, hoy parte de Juntos Somos Río Negro (JSRN), mantiene sintonía y no escatima esfuerzos para dejar mal parado a Ojeda. “Hay un intendente del PJ con un presidente del Concejo que parece opositor”, volvieron a plantear desde el peronismo local. El problema, a pesar del destrato, es el pasado del aliado circunstancial de Esquivel.
En el medio, en un momento delicado del municipio, Ojeda sabe que buena parte de su equipo no coincide con su línea. Esta semana se oficializaron cambios en el Gabinete por la salida de funcionarios con tareas claves como Fabricio Curzel –reemplazado por Maximiliano Baldi– en el área de Obras Públicas.
REDES. Las cuentas de Facebook son la mejor expresión de la pésima relación entre ambos. Iud, que siempre busca mantener el rol de mediador, no esconde su enojo y comparte viejos artículos de los tiempos que Esquivel se proyectaba dentro del partido. En respuesta, Pucho despotrica por el estado de las calles de SAO.