El fin de semana largo de carnaval ha dejado a Las Grutas, al borde del colapso. Con una ocupación total de los alojamientos, la ciudad costera se convirtió en el destino favorito de una multitud ávida de sol, playa y diversión.
La combinación de factores como el feriado, las agradables temperaturas y la celebración de la Fiesta Nacional del Golfo Azul, con actuaciones de artistas de renombre, atrajo a una marea humana hacia las hermosas playas de Las Grutas. Sin embargo, este fenómeno turístico sin precedentes ha presentado un desafío para muchos visitantes: encontrar alojamiento.
El creciente número de personas que llegaron sin haber hecho una reserva previa generó una búsqueda frenética de lugares donde hospedarse. Las redes sociales se convirtieron en un escenario de desesperación, con mensajes de viajeros solicitando ayuda para encontrar alojamiento, algunos incluso con tono de urgencia al estar acompañados por niños pequeños.
Un caso destacado fue el de Naty, quien optó por una medida creativa al dibujar un aviso en la arena de la playa y compartirlo en grupos de alquileres temporarios en redes sociales. Esta acción, que se viralizó rápidamente, ejemplifica la necesidad urgente de encontrar alojamiento y la inventiva de los visitantes frente a la escasez de opciones.
Aquellos que no lograron asegurar un lugar donde hospedarse e carecían de equipamiento para acampar, se vieron en la situación de pasar la noche en sus vehículos, buscando desesperadamente lugares adecuados para estacionarse.
Carlos Rivas, titular de la Asociación Civil de Propietarios de Alojamientos para Fines Turísticos, señaló que esta fue una temporada atípica, marcada por un aumento sorpresivo en la ocupación, a pesar de las bajas reservas previas. Rivas explicó que muchos turistas buscaron ofertas de último momento, lo que condujo a un ajuste en los precios de alquiler y a la eliminación de servicios como sábanas y toallas para adaptarse a la situación económica.
A pesar de los desafíos, Las Grutas se consolida como un destino turístico codiciado, con precios de alquiler acomodados que oscilan entre los 30 y 60 mil pesos por día para propiedades cercanas al mar y con servicios básicos. Sin embargo, se espera una notable disminución en la concurrencia a partir de esta semana, marcando el inicio del declive de la temporada, con la esperanza de un repunte para Semana Santa a fines de marzo.