El libro de quejas de la delegación municipal o de la oficina de turismo recibe periódicamente escritos de visitantes que dejan plasmados las principales quejas respecto a sus vacaciones en la villa balnearia.
El descontento que dejan los veraneantes principalmente son:
- Atención en comercios o lugares de gastronomía
- Precios en gastronomía
- Incumplimiento de los propietarios (esencialmente en lugares no habilitados) o bien ofrecimiento por internet de una imagen distinta a la realidad con que se encontraron al ingresar al departamento o casa.
Al respecto de esto último, la secretaria de turismo Nadina Gutiérrez mencionó que “hay muchos que no han sido fiscalizados porque no se han acogido a las normas que establece el municipio en materia de inscripción de lugares de alojamiento” indicó la funcionaria “el otro día un turista llegó a nuestras oficinas a quejarse que por internet le alquilaron un departamento para seis personas, que finalmente era para dos, entonces se acercó a comentar su queja con el enfado lógico, atrás llegó el propietario que lo increpó, resulta que el dueño siquiera cumplía con las reglamentaciones básicas” sostuvo Gutierrez.
“Seguiremos este año trabajando de manera ardua para que se puedan fiscalizar y recomendamos que los lugares que elija la gente estén habilitados, sé que hay muchos que no lo habilitan para no pagar los impuestos y las tasas correspondientes, pero eso va en contra del destino turístico” aseveró la funcionaria.
Sobre las quejas en gastronomía, comentó “es muy importante rever las pautas de atención al público, es algo que hay que mejorar sustancialmente” afirmó.
Otras quejas:
- Falta de pago electrónico.
- Limpieza en la playa y bajadas.