La falta de sensibilidad social de aquellos que hoy nos gobiernan no debería asombrarnos a estas alturas del partido.
La cartera de desarrollo social de Nación, con la veña de sus referentes locales, aplaudidores de estas acciones y consecuentes con su postura clasista y excluyente, vulneran seriamente los derechos de aquellos, que como si fuera poco arrastrar una «discapacidad», tienen que sufrir también los embates del estado que más allá de sumirlos en una crisis irresponsable cuestionan y juzgan sin ninguna sensibilidad, a aquellos impedidos de trabajar por dolencias e imposibilidad.
Suspenden arbitrariamente, el magro sustento de personas físicas con el argumento banal de…hay que ver si se lo merecen. Caraduras y escoria de la política, avanzan en el ajuste sobre ancianos postrados, mujeres ciegas, chicos dializados e impedidos motrices, mientras ellos disfrutan de los beneficios del estado que soporta en silencio sus abultadas remuneraciones.
Exponer a treinta vecinos poniéndolos bajo la lupa inquisidora, no es más que un atropello a sus imposibilidades y su condición de persona. Como si fuera poco, transitar por esta vida con desventajas, los que nos representan se encargan irresponsablemente de humillar, privando de lo básico a aquellos pobres indefensos, sin posibilidad de sustento. Mientras tanto, los actores políticos que viven ostentosamente, se dan el lujo de suspender «por las dudas» magras e insuficientes pensiones con el argumento de cuidar los erarios del pueblo. La funcionaria de nación, su representante provincial y Nicolás Carassale, hoy a cargo del Anses en nuestra localidad, seguramente son probos y capacitados para decidir sobre los beneficios que deben percibir los imposibilitados.
Seguramente, estos funcionarios habrán dedicado su vida al trabajo, sabrán lo que es pasar necesidades, sufrir los avatares del hambre y el desamparo y por sobre todo, padecer las necesidades básicas de una persona. Fueron contra los obreros y trabajadores que consideran ñoquis, maestros que son vagos, chicas que se embarazan para cobrar un subsidio, Pymes improductivas, y ahora… contra discapacitados que según ellos, tenemos que ver si en realidad lo son.
Se les está yendo la mano, muchachos. Con la desgracia ajena, NO.
Sergio «flecha» Pérez – Las Grutas
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