HISTORIAS SANANTONIENSES. La naciente comunidad de San Antonio Oeste de 1905 tuvo sus primeros médicos: Anselmo Estrella y José Fassone.
“Los doctores de entonces” como solían decirles en otras décadas pasadas y posteriormente se fueron perdiendo en el tiempo, como homenaje algunas calles tienen el nombre de aquellos profesionales.
El primer médico en arribar al naciente San Antonio Oeste fueron Anselmo Estrella, que ejerció a partir de 1905 en ese momento la población alcanzaba 975 habitantes, estuvo solo un lustro. Era un hombre de de unos 65 años.
Estrella atendió en un consultorio muy modesto y pocos elementos, pero con mucha determinación. Sencillo como su figura y su andar. Llegó desde Patagones con la empresa Sassemberg y atendía a los portuarios y vecinos en general.
José Fassone, médico ferroviario que llegó alrededor de 1909, en los primeros meses de «la construcción» del ferrocarril, tenía más de 50 años y atendía en el consultorio de la enfermería del Ferrocarril, en ese año la población era de 1575 personas.
Justamente “la llegada del tren” trajo posteriormente los primeros galenos que ejercieron en la zona, con la mayoría de los obreros ferroviarios.
No se registran mayores datos acerca del doctor Estrella, salvo que falleció el 13 de mayo de 1910 de manera repentina causando profundo dolor en la comunidad local.
En cuanto al doctor Fassone, que ejercía en el consultorio del Ferrocarril habilitado en esos días, se sabe que en esa primera época atendió a ferroviarios y también a los del pueblo. Sin embargo, hacia 1913, afectado por una enfermedad, falleció rumbo a Buenos Aires en un vapor de carga.
En 1914 llegó a San Antonio Oeste el doctor Rogelio Cortizo, un hombre tildado de «gran humanidad» por sus pacientes. Se desempeñó en una sala de primeros auxilios, su primer vivienda fue una precaria casilla de madera del Ferrocarril que quizás aún esté en pie, aunque no sabemos cual de ellas fue. Estuvo hasta el año 1923 y fue destinado a Ingeniero Jacobacci, lo reemplazó el doctor Bagnatti.
Más tarde llegaron los médicos ferroviarios Miguel Lembeye, que según cuentan ejerció la medicina “como un verdadero apostolado” entre 1919 y 1929, Justino Ramos Mexía, Carlos María Mercader, desde 1925 a 1942, Manuel Cassano y Alfredo Candal, entre el 41 y el 51.
Entre muchos otros que llegaron a fines de los años 50 los doctores Manuel Cassano, Ronchetti, Gallegos, Luis Pontillo; Mario Montano, Rodolfo Funes y Aníbal Serra Capdevila. (Fuente Izco-Lefevre/Pesaresi)