La preocupación crece en las costas argentinas ante el aumento alarmante de casos de Influenza Aviar. En Río Negro, se han contabilizado hasta el momento 266 enterramientos de aves marinas, y la situación está lejos de mejorar.
Diariamente se informan entre 10 y 20 animales muertos o con síntomas, como comportamiento errático, convulsiones o secreciones. Hasta ahora, no existen estimaciones oficiales sobre la duración de esta epidemia.
El titular del área de Fauna de Río Negro, Fabián Llanos, expresó su preocupación: «El número de ejemplares afectados sigue en aumento. Todos los días se registran nuevos casos en las costas rionegrinas, desde la desembocadura del río Negro hasta Sierra Grande. Y las provincias vecinas no están exentas de esta problemática».
VDMNoticias publicó el diálogo en programa «Buscando la Vuelta» de Radio Nacional Viedma con Llanos quien enfatizó que «el número es lo de menos» y que el comportamiento del virus está resultando impredecible. Aunque se había observado una gran mortandad de aves, lobos y pingüinos en Perú y Chile, se esperaba que no afectara a esta región. Sin embargo, ahora se encuentran enfrentando esta crisis sin conocer su duración.
Llanos destacó que, en el Pacífico, la epidemia persistió durante varios meses y anunció que en la próxima reunión del Comité de Crisis se solicitarán estimaciones a especialistas en la materia.
Para abordar esta situación, dos veterinarios especialistas en epidemiología y mamíferos marinos de Buenos Aires, pertenecientes a una organización internacional, llegaron a Viedma el pasado fin de semana. Realizaron muestreos para secuenciar el virus y determinar si ha mutado o si representa una amenaza para los humanos. Hasta el momento, no se han encontrado aves muertas infectadas en las costas de Río Negro.
En el control de la epidemia, es fundamental la disposición de los cuerpos de los animales. El enterramiento o la incineración se llevan a cabo en zonas donde no es posible cavar un pozo debido a acantilados o restingas.
«Estamos siguiendo el protocolo de la Red Federal de Varamientos, basado en estándares internacionales. La primera recomendación es enterrar al animal muerto en el mismo lugar donde aparece y taparlo con un metro de sustrato local. Eso es lo que se está haciendo», explicó Llanos.
En los últimos días, en El Cóndor, se realizaron 12 enterramientos de lobos marinos con la colaboración de diversas organizaciones y organismos gubernamentales. También se llevó a cabo una experiencia de incineración con la asistencia de los Bomberos de Viedma y Defensa Civil de la provincia, aunque su uso está en discusión y se considera para casos individuales en lugares de difícil acceso.
El Comité de Crisis, liderado por la secretaria de Ambiente, Dina Migani, continúa reuniéndose con autoridades, técnicos de Salud, representantes de los municipios involucrados, universidades, Prefectura, Bomberos, Defensa Civil y Senasa, entre otros.
A pesar de que el virus es zoonótico, no se han registrado casos de contagio a humanos en Argentina, y los casos en el resto del mundo son escasos. En abril, se reportó un caso en Antofagasta, Chile, uno en Ecuador y otro en Estados Unidos.
Llanos hizo un llamado a la población para que respete las recomendaciones de no acercarse a animales muertos o enfermos y para que mantengan a sus perros atados en la playa. La situación sigue siendo motivo de preocupación y vigilancia constante en las costas argentinas.
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