El entrenador Martín Rolando, referente del fútbol femenino de Sportivo Ferrocarril, compartió un balance cargado de emoción luego del reciente campeonato obtenido por el equipo, un logro que —según remarcó— superó ampliamente las expectativas de un proyecto que nació hace apenas nueve meses y que ya cosechó dos finales y un título.
Rolando comenzó agradeciendo el acompañamiento permanente a la actividad deportiva. El técnico destacó que este camino no fue recorrido en soledad. Junto a él trabajó el profesor Juan Fernando Sáenz, conocido como “Maya”, con quien conformó la dupla que encabezó el proyecto. “Era algo nuevo, algo que está creciendo con mucha fuerza en todos los clubes de la región y del país. Queríamos presentar la propuesta y ver cómo se mostraba en sociedad. La verdad es que superó ampliamente nuestras expectativas”, afirmó.
Recordó que el proyecto comenzó en los primeros días de marzo: “En nueve meses llegamos a dos finales y ganamos una. Es un montón. Ellas ya estaban felices por haber llegado a la final del torneo pasado”.
El entrenador remarcó que desde el inicio insistió en hacer algunos ajustes y retoques que fortalecieran al grupo: “Confiaba mucho en ellas. Si podíamos un poquito más, estaba convencido de que lo íbamos a lograr, y así fue”.
Rolando subrayó que el respaldo de la subcomisión de fútbol fue clave para consolidar la disciplina femenina: “Avalaron completamente la integración del fútbol femenino. Entendimos también la importancia de la inclusión, que hoy es tan latente. El grupo respondió de manera increíble, con compromiso y sentido de pertenencia”.
El técnico resaltó que las jugadoras no solo se involucraron desde lo deportivo, sino también en la vida institucional del club: rifas, eventos y actividades sociales. “Que sean parte desde el minuto cero fue importantísimo. Ese aporte también construye”, aseguró.
Uno de los avances más significativos fue la posibilidad de trabajar en el nuevo predio del club. “Nos ayudó un montón. Poder desarrollar nuestras actividades ahí, haciéndolo crecer de a poquito, poniéndole alambre, cariño y amor al lugar que nos corresponde, fue fundamental”, señaló.
El campeonato obtenido el último domingo tuvo un condimento especial: se definió como visitantes y dando vuelta el resultado. “Llegamos prácticamente a la misma hora en que terminó la primera y juntarse todas las categorías para festejar fue algo hermoso. Lo soñábamos, y gracias a Dios se nos dio”, relató.
Rolando insistió en que el trabajo colectivo y la claridad del objetivo fueron la base del éxito: “Siempre se van sumando personas. Con un objetivo claro, se puede ir encaminado”.
Sobre lo que significó el logro en lo personal, el entrenador no ocultó la emoción: “Mucha satisfacción. Uno lo va pensando, masticando, digiriendo. Sabés que dejaste muchas cosas y que hacés todo a pulmón, solo por el sentimiento de los colores. Una vez que uno se involucra, lo hace con gusto. Es parte de uno mismo”.
Reconoció que el camino fue exigente, pero alentado por un proyecto ambicioso: “Con esfuerzo, las cosas se van logrando. A veces lleva más o menos tiempo, pero la satisfacción de ver todo esto es enorme”.
Con un año intenso, dos finales, un título histórico y un proyecto que promete seguir creciendo, el fútbol femenino de Sportivo Ferrocarril atraviesa su mejor momento. Y detrás de ese presente, un equipo, un cuerpo técnico y un club que apostaron por un sueño que hoy ya es realidad.
