Al menos nueve personas detenidas, entre ellos cuatro menores, ingresaron con violencia, rompiendo la puerta de la casa de dos ancianos en Calle Torello entre San Juan y Malvinas, en horas de la madrugada de hoy.
La banda de delincuentes, casi todos habrían estado en estado de ebriedad y probablemente por actitudes observadas, se presume que también con consumo de alguna sustancia prohibida. Primeramente intentaron ingresar a una fiesta en la sede gremial de la UnTER, al no permitírsele el acceso, tomaron rumbo hacia la casa de la familia Calfín.
Allí comenzaron a patear la puerta de la vivienda hasta destrozarla, ingresaron a la morada y comenzaron a romper todo, a los gritos, desaforados, según manifiestan testigos, la mayoría vecinos del lugar.
Destruyeron televisores, electrodomésticos, muebles, incluso el automóvil estacionado, mientras los ancianos alcanzaron a resguardarse dentro del baño, con ello, el pastor Calfín y su esposa, lograron salvar su integridad física.
Tanta era la violencia que, al llegar la policía, debió utilizar postas de gomas para disuadir el accionar de los vándalos.
Los patoteros también atacaron a los efectivos con palos y piedras, además dañaron el vehículo de un vecino y el frente de otras viviendas. Asimismo resultó herido un efectivo policial.
Los integrantes de la Comisaría 10ma., lograron reducirlos y aprehendieron a nueve de ellos.
Cinco mayores serán derivados a Viedma por orden del juez de instrucción en turno, mientras que los cuatro menores fueron entregados a sus tutores.
Pasado el episodio, personal de salud debió atender a los ancianos. Familiares del pastor Calfín y su esposa radicaron la denuncia penal en la dependencia policial sanantoniense. También interviene la fiscalía de turno.