¿REUMATÓLOGO O TRAUMATÓLOGO? ¿A QUIÉN DEBO VER?





“Me duele una rodilla”, “me duele la cadera”, “me duele tal o cual articulación”, “me duelen los huesos” ¿debo acudir al traumatólogo? Todavía hoy mucha gente y médicos que así lo creen, aunque eso vendría a ser lo mismo que una persona que padece dolor de pecho y tos acuda al cardiocirujano para que lo opere. ¿Cuál es el especialista adecuado?

El especialista de los huesos.

Sigue estando muy arraigada la idea de que el especialista “de los huesos” es el traumatólogo. Este desconocimiento y confusión se explica en parte porque la reumatología es una de las especialidades médicas más recientes en medicina interna, no siendo reconocida como especialidad médica independiente hasta hace escasas décadas. Hasta entonces, el tratamiento de los trastornos del aparato locomotor había recaído en traumatólogos y cirujanos ortopédicos, pese a que, en la mayoría de ocasiones, los pacientes no iban a necesitar de tratamiento quirúrgico.

El proceso adecuado y lógico en todas las enfermedades y trastornos de las articulaciones debería ser el siguiente: médico de cabecera, para identificar la posible enfermedad, reumatólogo, para aplicar tratamientos farmacológicos y no farmacológicos, y, sólo en última instancia, el traumatólogo para realizar intervenciones quirúrgicas. El reumatólogo es el especialista adecuado para diagnosticar y tratar las patologías del aparato locomotor como la artrosis y otras enfermedades reumáticas, por medios no quirúrgicos. Siguiendo con el ejemplo de la artrosis, sólo como última opción el reumatólogo derivará a sus pacientes al especialista en cirugía para tratar la artrosis por medio de prótesis de cadera o de rodilla, por ejemplo.  Acudir al fisioterapeuta también es un error, pues el fisioterapeuta se encarga por lo general de aplicar el tratamiento, no de diagnosticar la enfermedad ni de determinar el tratamiento a seguir.

Traumatólogos y reumatólogos ¿en qué se diferencian?

Según la Sociedad Española de Reumatología (SER), el reumatólogo es el especialista médico “que diagnostica y trata las enfermedades del aparato locomotor y es el primer especialista que ha de valorar, diagnosticar y tratar dichas enfermedades”, mientras que el traumatólogo o cirujano ortopeda es un “especialista cuyo campo de actuación se limita al tratamiento quirúrgico u ortopédico de las enfermedades de los huesos, tendones o articulaciones, ya sean de causa traumática (golpes, esguinces) o congénita, o bien para intervenir quirúrgicamente las secuelas que el tratamiento médico no logró evitar en las enfermedades reumáticas”. Para decirlo de una forma sencilla: el reumatólogo es el médico y el traumatólogo es el cirujano.

Es necesario llevar a cabo una labor de concientización entre la población y la comunidad médica pues esta seguramente redundará en una mejor atención sanitaria para los pacientes. Así pues, ante la pregunta de a quién acudir si “me duele la rodilla” o “me duele la cadera al caminar” o “me duelen todos los huesos”, la respuesta está clara: al reumatólogo.

Dr. Edgar Torres, traumatólogo, Hospital A. Serra.

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