La protesta se extendió dentro del pasillo de ingreso a las dependencias del ejecutivo y el Concejo Deliberante, que previamente debió suspender sus tareas por el humo de la quema de cubiertas, que también trajo aparejado un acercamiento de vecinos, quienes iban a denunciar penalmente (hay una ordenanza que lo prohíbe) por el hollín que se metía en las casas aledañas y provocaba problemas de salud a sus moradores.
Luego, los estibadores se dirigieron de manera ruidosa (bombos y redoblantes), a tomar el hall del edificio municipal, cerrando las puertas, pero ente la atenta mirada de la custodia policial solicitada.
Asimismo, fueron recibidos por el intendente Luis Ojeda, quien se comprometió a buscar una solución, aunque sobre el pedido de dar de baja la cooperativa, si la misma no pagase el canon correspondiente, se licitará la carga y descarga del muelle «Heleno Arcángel», de lo contrario, si cumplen con el pago deberán esperar hasta tanto haya un incumplimiento o bien finalice la concesión.