Hace seis años, bajo el gobierno de Javier Iud, en el sector derecho de la calle Lomitas del Jahuel, varias familias ocuparon terrenos, primigeniamente en carpas y algunas pertenencias, otros improvisaron precarias casillas de chapa y cartón con postes.
El hecho ocurrió en septiembre del 2013 y el conflicto por esas tierras perduró hasta el año 2016 cuando el Juez Mussi ordenó el desalojo de esas 20 familias que resistieron a tal iniciativa legal, cuya denuncia fue de la municipalidad. El desalojo no prosperó y nunca fueron recibidos por las autoridades comunales para determinar una formalización de ese lugar.
Actualmente la policía llega cada mes para revisar si a crecido la misma, ya que está rodeada de lotes fiscales y muy cerca de los piletones de decantación cloacal.
En la mayoría de los lotes actualmente se pueden observar construcciones de ladrillos y bloques, escasas viviendas permanecen en casillas de madera y chapa. Al conglomerado en ese barrio se lo denomina Latinoamérica por que residen familias que llegaron de Bolivia y Paraguay.
“Queremos los servicios”
Las mujeres, quienes principalmente llevan el reclamo adelante, señalaron “nosotros fuimos al ANSES, hicimos todo los papeles, pero parece que no prosperó, con ese papel en ANSES nos dijeron que podemos iniciar los tramites para los servicios” señalaron.
La nueva ley votada en el Congreso Nacional “de regularización dominial de los barrios populares” permite la integración urbana, pero estipula que deben pagar el lugar y los servicios para una mejor calidad de vida.
“Nosotros hicimos, cada casa, los pilares para la luz, pero solo dependemos de un línea de red solidaria que EDERSA nos brindó para que todos podamos conectarnos de ahí y cuando llueve eso genera descargas e incluso provocó principios de incendios en viviendas, es un peligro».
«Tampoco tenemos agua, aquí todas las familias son trabajadoras, salimos a buscar el mango todos los días” indicaron además “nos prometieron que una vez que tengamos ese papel de ANSES lo debíamos presentar a la empresa, además en EDERSA nos dijeron que hagamos los pilares, los hicimos, fuimos cumpliendo, pero ahora quedó todo en la nada”.
Finalmente dijeron que se van acercar a la municipalidad para que se le reconozcan los lotes “hace seis años estamos acá, pasaron los cinco años que dijeron desde la municipalidad que no podamos tener ningún acceso a la tierra, ese plazo finalizó en septiembre del año pasado, ahora queremos que nos reconozcan, no queremos nada gratis, solo empezar a regularizar para tener los servicios de luz y agua” afirmaron. (foto archivo diario RN)