HISTORIAS SANANTONIENSES. Hay hombres que dejan una profunda huella en el rescate del acervo histórico de sus pueblos. Que con verdadera pasión, estudio e investigación realizan un aporte invalorable para rescatar el pasado y traerlo a la memoria para las futuras generaciones.
Es que no hay pequeñas ni grandes historias, solamente hay Historia, así con mayúscula. Y la historia de San Antonio Oeste le debe mucho a quién fuera mi amigo don Adolfo Raúl Fragoza que cumpliría en estos días 97 años.
En la contratapa de su interesante libro “Vivencias del Este” el periodista Osvaldo Castro Ruiz expresa: “Don Adolfo Raúl nació el 22 de Mayo de 1926. Antes de conocerlo personalmente ya Elio (su hijo mayor) me lo había pintado de cuerpo y alma. También porque mi padre también vivió y le entregó, al igual que al autor de este libro, muchos años a los Ferrocarriles Argentinos, tuve esa intuición de una personalidad afable y me encontré con la sorpresa de su gran compromiso por rescatar la vida y obra de los pioneros patagónicos que fundaron primero el Este y luego el Oeste y los progresos que trajo aparejado el puerto y el ferrocarril. La historia la escriben a diario los habitantes de cada pueblo, pero cuántos de estos cientos de centros urbanos diseminados por la Argentina no la han podido plasmar en un libro. ¡Qué regalo para las generaciones futuras serán estas páginas! El relato de don Adolfo tiene la dinámica de todo aquello que se investiga con mucha pasión mediante la lectura de escritos de indudable valor histórico, el haber conocido y recogido testimonios orales y, en otros casos, de haberlos vivido. También encontrarán en este libro la admiración que despierta el paisaje patagónico y el amor a esta tierra que demostraron aquellos que aún con las dificultades que acarreaba hacerse del agua vital para la supervivencia, perseveraron y consolidaron el asentamiento poblacional en la desértica costa rionegrina”.
“En los umbrales de un nuevo siglo esta recopilación de datos históricos sobre orígenes de San Antonio comienza con la referencia de las expediciones de Magallanes (1520) y la de Goicochea y el Teniente García (1779), avanza hasta principios de siglo para enumerar las primeras poblaciones merced a datos que constan en el Juzgado de Paz; describe la vida de los pioneros y también refiere la decisión del Ministro Ezequiel Ramos Mexía de efectuar el tendido ferroviario entre el puerto y el lago Nahuel Huapi. Hay referencias a importantes instituciones ligadas a San Antonio Oeste y a la introducción de los elementos que fueron posibilitando la comunicación con otros lugares. En definitiva –escribe Castro Ruiz- se trata de un valioso aporte como libro de consulta y un entretenido relato de hechos que vale la pena leer”.
Su hijo, Carlitos, cita emocionado algunas de las frases de don Adolfo que quedarán para siempre entre nosotros: “El blanco médano y el mar azul nos pintan la bandera en este suelo patagónico; y tal vez la más conocida, verdadero lema de San Antonio Oeste anunciando la tradicional Fiesta del Golfo Azul: “Desde el golfo más azul del continente”.
Su segundo libro –hoy casi inhallable- se llamó “Paralelas de acero”, una verdadera historia del Ferrocarril en la provincia de Río Negro.
Extraño su presencia porque siempre venía a mi casa de Las grutas para conversar largas horas sobre esta pasión común que teníamos que es la historia de nuestros pueblos.
Podemos decir que quienes han dejado esa huella que citaba al principio son los hombres imprescindibles para que no pierda ni se tergiverse la historia de nuestros solares nativos.
Me queda su dedicatoria “Al Maestro Jorge Castañeda, con afecto y augurios de sucesivos éxitos”.
San Antonio Oeste 05-01-2000. Hoy está en los anaqueles de mi biblioteca entre los más de mil libros dedicados por sus autores, (por Jorge Castañeda Escritor – Valcheta)
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