La legisladora Ayelén Spósito planteó la emergencia alimentaria para asistir a comedores y merenderos
La profunda crisis económica que atraviesa el país y se refleja en la provincia llevó a la legisladora de Vamos con Todos, Ayelén Spósito, a presentar un proyecto para declarar la emergencia alimentaria en Río Negro.
“Luego de ver los datos de la pobreza, cuando vemos que la población no llega a fin de mes y no tiene para comer o tienen para una sola comida y la gente que va a los comedores aumenta decidimos trabajar nuevamente en la declaración de la emergencia alimentaria y ahora esperamos tener una respuesta positiva desde el Ejecutivo”, sostuvo la parlamentaria sanantoniense.
Indicó que “está pendiente una reunión con el ministro de Desarrollo Social, Juan Pablo Muena” para avanzar en la temática.
Destacó que “lo fundamental es resolver el tema de la comida, los últimos números son catastróficos, llegamos al 57 por ciento de pobres en la Argentina y en nuestra provincia, que es productora de alimentos no es lógico que la gente no tenga para comer. Creemos que hay mecanismos para que la gente pueda comer a un costo menor”.
Explicó que “el proyecto declara la emergencia alimentaria y crea el consejo nutricional en el que participan Salud, Educación, las iglesias y todos los que alimentan a personas como centros comunitarios, comedores y merenderos. Proponemos hacer una evaluación y un registro de manera semestral para fortalecer esos espacios, especialmente frente al vaciamiento que se hizo en estos tres meses desde el gobierno nacional”.
Al respecto sostuvo que “todos los comedores y merenderos que existen se registran y les llegaba ayuda directa a ellos. En muchas provincias o municipios se habían establecido tarjetas como en Viedma. Pero todo eso se suspendió totalmente desde el mes de diciembre”.
Aseguró que “hoy las compañeras hacen alguna rifa o se ponen a vender para poder sostener y comprar alimentos para darle de comer a vecinos y vecinas. En muchos lugares tuvieron que cerrar ante la demanda. La emergencia significa reforzar la provisión a las escuelas, comedores y merenderos y buscar alimentos de manera más económica. También crear corredores productivos, con bolsones de frutas y verduras. La intención es que el Ministerio acompañe para que sea viable. Nos preocupa porque “el tiempo de la política no es el mismo que el de la gente”.
Calculó que “hay alrededor unos 60 comedores en la provincia teniendo en cuenta todas las organizaciones sociales. Algunos comedores sostienen a unas 80 familias”.
Resaltó la situación de Bariloche que “tiene una brecha social muy amplia que no es de ahora. Los precios están el triple de cualquier otra ciudad, un alquiler no baja de 160 mil pesos un monoambiente y peor es para quienes no tienen trabajo registrado. Nos reunimos allí con la CGT Zona Andina, que está viendo un panorama muy complicado en esa localidad”. (fuente Diario La Palabra)
