Hace cinco años atrás, un 23 de febrero, la sociedad sanantoniense se conmovió por la muerte de un joven de 17 años, al tocar un alambrado electrificado en una cancha de fútbol 5 en el Club Rácing. Una herida que no cierra en la comunidad toda.
En la causa hubo tres condenados, el presidente del club, el que explotaba comercialmente la cancha y el ex director de comercio municipal.
Los relacionados con el Club Rácing, Barilá y Sandoval, condenados por “homicidio culposo”, ninguno fue a prisión. Murguiondo, también declarado culpable, llevó la apelación hasta la Suprema Corte de Justicia, el pasado 9 de febrero, la Corte desestimó el recurso, dejando firme la condena, que ya fue cumplimentada.
Cabe mencionar que también se encuentra en el expediente, que la condena penal formulada en instancias preliminares, quedó firme. el Superior Tribunal de Justicia provincial rechazó de la queja realizada por los acusados.
En agosto del año pasado, en otra instancia, un fallo civil hizo lugar a la demanda por daños y perjuicios interpuesta por la mamá y el papá de la víctima.
Nicolás Gutierre falleció el 23 de febrero de 2018. Se electrocutó mientras jugaba un partido, tras tomarse del alambrado que delimitaba la cancha y recibir una descarga mortal.
Esto derivó en varias marchas de vecinos con pedido de justicia y fallos judiciales que nunca conformaron a la familia y a la sociedad en general.
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